Ingredientes:
- 1 vaso de aceite de oliva para la masa
- Aceite de girasol para freir
- 1 vaso de vino blanco
- Azúcar (cantidad necesaria para rebozar)
- Harina (cantidad que admita)
- Granos de anís o matalauva
- Piel de limón o naranja
Elaboración:
Preparación del aceite:
En una sartén, calienta el aceite de oliva junto con la piel de limón o naranja. Una vez que la piel esté casi dorada añadimos el anís, dejamos unos segundos y retiramos del fuego y deja enfriar. Luego, saca la piel del aceite.
Mezcla de ingredientes:
Con el aceite ya frío en el mismo recipiente, añade el vino blanco, un poquito de azúcar (esto es opcional ya que luego van rebozados). Poco a poco, incorpora la harina mientras amasas la mezcla.
Amasado:
Continúa agregando harina y amasando hasta que la masa sea manejable y no se pegue a las manos. Deja reposar la masa durante una media hora.
Extensión de la masa:
Prepara un rodillo y extiende la masa en la encimera hasta que quede fina.
Formación de los rizos:
Corta la masa en tiras de 1,5cm más o menos de ancho y enróllalas alrededor de cañas naturales o las que puedas encontrar en ferreterías. Estas cañas, que se encuentran en el campo, son tradicionales para hacer este dulce.
Fritura:
Fríe los rizos en abundante aceite caliente. Las cañas se deben retirar cuando la masa se despegue de ellas. Una vez fritos, saca los rizos del aceite y déjalos escurrir.
Envolvimiento en azúcar:
Coloca azúcar en una bandeja. Cuando los rizos estén bien escurridos, pásalos por el azúcar y colócalos en otra bandeja para servir. Rico dulce tradicional y muy fácil de hacer.